Lo de Manoli Contreras y Grufesa fue un flechazo. El idilio profesional que aún mantienen empresa y empleada comenzó como un amor a primera vista hace ya 23 años.

“Aún lo recuerdo muy bien. Me incorporé un 14 de febrero de 1993, precisamente para una campaña de fresas, en manipulación. Había un hueco por la maternidad de una chica y hacía falta una persona para ayudar a un compañero. Entré yo y ya desde entonces me quedé en la compañía, en plantilla fija desde ese mismo verano” recuerda Manoli, que actualmente desempeña su labor en el área laboral, adscrita al departamento de Recursos Humanos.

“Me encargo de tramitar las altas, todo lo que tiene que ver con los contratos de trabajo, de las nóminas y de todas las gestiones relacionadas con mi área, como las bajas por enfermedad, maternidad, etc” detalla Manoli Contreras, quien explica que para esta campaña se batirá el récord de trabajadoras contratadas para la línea de manipulación y se llegarán a gestionar durante la campaña de frutos rojos más de 2.500 contratos”.

“Sólo en manipulación vamos a llegar a tener a más de 600 trabajadoras, superando las que tuvimos el pasado año. Grufesa y el sector son motores de creación de empleo, da mucho trabajo, especialmente a muchas mujeres, que pueden llegar a representar más del 80%, y teniendo en cuenta que, por ejemplo el año pasado la campaña duró seis meses, eso es al final una ayuda económica muy importante para una familia”, subraya.

Respecto a lo más grato de su labor diaria, lo tiene muy claro: “el contacto personal”. “Lo que más me gusta es el trato, el contacto que tengo con las personas, ese carácter humano que requiere mi área. Por nuestro departamento, por su peculiaridad, pasa mucha gente y nos conocemos prácticamente todos. Todo el mundo viene a resolver sus dudas. También me reconforta ayudar a los extranjeros que vienen a que los ayudamos a solucionar sus dudas burocráticas y de documentación. Me encanta ayudarlos, conocer a la gente y la historia que tiene detrás”, añade.

Después de más de dos décadas en Grufesa, Manoli Contreras, residente en San Juan del Puerto y madre de un hijo, destaca la gran evolución que ha experimentado la compañía. “Cuando empecé éramos siete compañeros en el área laboral, con pocos socios, y todo se hacía de manera manual, había que llevar los contratos a la Seguridad Social, había sólo un ordenador, utilizábamos máquinas de escribir… y ahora somos más de 30 compañeros y se hace todo de forma telemática y mucho más rápido”.

“La compañía ha crecido muchísimo, se ha convertido en una gran empresa en todos los aspectos, y da trabajo a mucha gente”, si bien puntualiza que “lo que no ha cambiado y eso me gusta es que no se ha perdido ese carácter familiar que siempre ha tenido, que nos hace sentir como una gran familia y que y a los más veteranos nos permite evocar y recordar los buenos momentos que hemos vivido”.

Entre los principales valores de la compañía, Manoli Contreras destaca muy especialmente el trato que se dispensa a sus trabajadores ya que “que todo el que viene a Grufesa se siente integrado desde el primer minuto; se siente cómodo y partícipe, como uno más”, así como la armonía que hay “entre todos los compañeros y entre todos los departamentos, ya que siento que somos como una gran familia”.

Y después de un gran 2016, sólo pide para el próximo año “que esto siga funcionando, que todos los compañeros que estamos en esta gran empresa podamos seguir otra campaña más, y así lo vamos a intentar poniendo todo de nuestra parte para que esto siga funcionando y se siga contando con nosotros”.