La multinacional Bayer hizo entrega en Fruit Attraction de una placa de agradecimiento al presidente de la compañía, Francisco Márquez, por los 10 años de trabajo conjunto a través del proyecto Food Chain Partnership. El director técnico de Grufesa, Diego López Vergara, subraya en un encuentro de la cadena de valor el punto de inflexión que supuso en la filosofía de la empresa.
Grufesa ha festejado hoy en un acto celebrado en el stand de Bayer en Fruit Attraction el décimo aniversario de su pionera adhesión al proyecto Food Chain Partnership de Bayer, orientado a la producción de una fruta cada vez de mayor calidad, más segura y saludable, cumpliendo así con su compromiso con la sostenibilidad medioambiental como uno de los pilares de su modelo productivo.
Tanto Bayer como Grufesa festejaron durante la muestra 10 años desde que, como una de las empresas de referencia del sector fresero onubense, la cooperativa moguereña se sumase de forma pionera al programa Food Chain fortaleciendo y alimentando una relación que la erigió en la primera empresa empresa, a nivel mundial, que logró certificar el 100% de su producción con el módulo Add-on Food Chain Partnership de Bayer CropScience, elaborado como una certificación adicional a la de la norma GLOBALG.A.P.
Al término de la celebración de la efeméride, responsables de Bayer hicieron entrega al presidente de Grufesa, Francisco Márquez, de una placa conmemorativa de la misma para agradecer la confianza y el esfuerzo conjunto que desde entonces han realizado de forma sinérgica para avanzar hacia una producción cada vez más sostenible para garantizar al consumidor una fruta con una calidad única, segura y saludable que diferencia a Grufesa de la competencia y le da un valor añadido en los mercados.
Dentro de los actos conmemorativos, Grufesa ha participado en un encuentro de Bayer en Fruit Attraction con representantes de la cadena de valor alimentaria, que han debatido sobre las innovaciones que son necesarias para que los productores puedan cumplir con las demandas de los consumidores, regulatorias y medio ambientales. En el debate han participado los productores Navarro de Haro y Grufesa, la cadena de distribución Family Cash, la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU), y Bayer, a través de su iniciativa Food Chain Partnership (FCP).
En el debate, que ha sido moderado por la periodista Lidia Gutiérrez García, el director técnico de Grufesa, Diego López Vergara, ha destacado la nueva filosofía de trabajo en la agricultura que ha supuesto para ellos FCP, “buscando el equilibrio entre el buen desarrollo del cultivo y la producción de una fruta saludable y sostenible.” López Vergara ha explicado durante su intervención que “trabajamos de forma conjunta con el equipo técnico de Bayer para conseguir tratamientos óptimos que nos permitan una reducción casi total de los residuos, pero también para llevar a cabo una mejor gestión del agua y de los recursos. El objetivo es conseguir productos de calidad y seguros para el consumidor siguiendo los principios de una agricultura sostenible”.
El encuentro contó también con la participación de Joaquín Haro García, responsable de calidad de la Finca Agrícola Navarro de Haro quien ha señalado que “la relación que tiene Bayer con las fincas productoras de Food Chain Partnership es de colaboración a la hora de seleccionar qué variedad de semilla se adapta mejor a las condiciones de cultivo, qué técnicas de manejo pueden ayudar a conseguir un mejor resultado, ayudar en la toma de decisiones respecto qué tratamientos fitosanitarios pueden minimizar la aparición de residuos avalando así una seguridad alimentaria y un programa sostenible a nivel productivo. Food Chain Partnership ayuda a tener una garantía en los productos, que el consumidor perciba todo el esfuerzo que se realiza para conseguir el objetivo de proporcionar una agricultura segura y sostenible”.
Pablo Miró Sanjuan, jefe de compras de frutas y verduras en Family Cash, ha declarado que “los consumidores a los supermercados nos piden seguridad alimentaria, ya lo dan por hecho y nosotros eso lo trasladamos a los productores. El consumidor pide un género de calidad visual, que llame la atención; calidad organoléptica, el producto tiene que ser visualmente bonito, y, además, tiene que ser bueno. Debemos de defender la agricultura, ayudarla en la transición hacia la sostenibilidad, y poner todos los medios a nuestro alcance, pues beneficia al consumidor. La seguridad alimentaria es muy importante, pero también el avance hacia un residuo cero, implantar en el campo herramientas que nos permitan tener una agricultura sostenible y que respete el medio ambiente”.
Por su parte, Fernando Moner, presidente de la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU) y directivo de la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) se ha mostrado firme al afirmar que “o la alimentación es sostenible o las generaciones futuras tendrán muchos problemas para poder acceder a todos los alimentos que tenemos hoy en día y, para buscar soluciones a la situación actual, el trabajo conjunto de todos los eslabones de la cadena alimentaria es fundamental. Al final los consumidores queremos productos que respeten la seguridad alimentaria y la sostenibilidad medioambiental, y que podamos acceder a ellos a un precio justo”.
Santiago Cerdà, responsable de marketing operativo de Bayer Crop Science y de Food Chain Partnership ha incidido en la apuesta de Bayer por mantener la colaboración a través de FCP, pero avanzando el modelo actual a las nuevas necesidades: “En estos momentos hay nuevos retos en términos de sostenibilidad, muchos de ellos impulsados por las estrategias europeas de Biodiversidad y De la granja a la mesa, por eso estamos trabajando para adaptar los servicios de FCP y ofrecer de manera integrada a los productores todas las herramientas que les permitan llevar a cabo una agricultura más sostenible, que cumpla con la demanda de los reguladores y de los consumidores de tener alimentos de calidad, con el mínimo de residuos”.
Food Chain Partnership es una iniciativa global de Bayer Crop Science que se encuentra implementada en 44 países y que cuenta con cerca de 100 proyectos adscritos en Iberia. Gracias al asesoramiento y la colaboración entre los expertos de Bayer y los técnicos de las fincas, se consiguen tratamientos más eficientes con menos residuos y menor impacto medioambiental.
El programa está enfocado principalmente a cítricos, uva de mesa, melocotones y nectarinas, así como frutas y hortalizas, por ser los cultivos en los que España es uno de los principales países exportadores.