El uso de estos vehículos, destinados al desplazamiento de nuestros técnicos de campo, logra ahorrar el consumo y reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Grufesa, firma de Moguer (Huelva) productora y comercializadora de frutos rojos, acaba de incorporar a su flota dos vehículos híbridos, más limpios y respetuosos con el medio ambiente que los convencionales, en su compromiso de reducción de la huella de carbono y de avanzar a hacia un concepto de movilidad más sostenible promoviendo la economía circular en el actual contexto de transición energética.
Estos dos nuevos vehículos, que pasan a formar parte de la flota utilizada por por nuestros técnicos de campo para desplazarse en su día a día, combinan eficiencia y sostenibilidad al apoyarse en un motor eléctrico, por lo que se logra disminuir el consumo y reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, contribuyendo así al respeto medioambiental de nuestro entorno.
Al combinar un motor eléctrico con otro de combustión interna, el uso de estos vehículos optimiza la autonomía y el rendimiento de conducción, ofreciendo siempre la máxima eficiencia, ya que logra reducir las emisiones entre un 25% y un 50% respecto a los coches tradicionales, y al mismo tiempo consumen menos, por lo que representan un ahorro también de combustible.
La incorporación de estos dos nuevos vehículos obedece al compromiso de Grufesa por promover un modelo productivo de agricultura circular basado en la utilización y aprovechamiento máximo de los recursos naturales (agua y energía) y la reducción de residuos para contribuir a proteger el entorno y los riesgos derivados de su sobreexplotación.
En este contexto se enmarcan, entre otras acciones, la renovación de su sistema de refrigeración alimentado con energía renovable generada por las placas solares fotovoltaicas instaladas en las cubiertas de Grufesa para optimizar la cadena de frío industrial, y otros tantos hitos que ha marcado su trayectoria desde su fundación en 1983 en materia de sostenibilidad medioambiental y eficiencia energética.
Entre estos destacan el impulso de la mecanización con la introducción de maquinaria automática (1990), la transición de microtúneles a macrotúneles, los primeros túneles de preenfriamiento (1994), su apuesta por la sostenibilidad como empresa pionera en la implantación de sistemas de monitorización y optimización para ahorrar en el uso de agua de riego (2013); o su política de reciclaje de envases agrícolas (Premio Sigfito (2014).
Un compromiso con la sostenibilidad que ha potenciado en los últimos años con logros como su reconocimiento en 2016 como la primera empresa del mundo en certificar toda su producción con el módulo ADD ON Food Chain Partnership de Bayer, y acciones como la reducción hasta en un 50% del uso de plástico en sus invernaderos, o la instalación de una planta fotovoltaica (2022) en su cubierta para contribuir al ahorro energético en su hoja de ruta hacia la reducción de la huella de carbono y emisiones de C02.
Grufesa, integrada por 41 socios y con más de 420 hectáreas de cultivo, comercializa sus productos en más de 20 países europeos, incluyendo España, además de realizar envíos puntuales a Oriente Medio. El 95% de sus ventas las destina al mercado exterior, donde ha evolucionado y consolidado su línea de negocio e imagen de marca adaptándose la exigente demanda de frutos rojos y satisfacción de nuevas experiencias de consumo, así como diversificando su producción mediante la incorporación de nuevos productos para abrir nuevas líneas de negocio.