Si hay una máxima que se cumple cada campaña fresera es el compromiso que adquirió Grufesa en su creación con su entorno social. Esta máxima se renueva cada campaña, cuando la cooperativa se convierte en una fuente de empleo para las personas del entorno. El empleo local es una constante en la cooperativa y el 100 % de sus trabajadores es de la zona.

En la cooperativa moguereña trabajan actualmente unas 600 personas (esta cantidad varía según el punto de la campaña) en diferentes tareas: manipulación, maquinaria, calidad, recepción de fruta, administración, etc. Estos trabajadores, la mayor parte de ellos fidelizados y que repiten cada campaña, son de Moguer y su entorno, llegando desde diferentes puntos de la provincia de Huelva.

Esta fidelización aporta estabilidad y calidad al empleo, además de ser manos expertas que conocen, cuidan y miman la fresa de Grufesa cada campaña. El 90 por ciento de este empleo es de mujeres.

Grufesa acaba de incorporar una nueva línea de manipulación de fresa que suma 30 empleos más a la cooperativa, además de aumentar la capacidad de producción de la planta.

“No entendemos Grufesa sin la aportación de valor añadido a su entorno. En este caso, generando empleo en la sociedad que nos acoge. Es otra de nuestras razones de ser, además de la de ofrecer al consumidor una fresa sostenible, saludable y respetuosa con el medio ambiente”, ha explicado el gerente de la cooperativa, Carlos Cumbreras.